miércoles, 16 de febrero de 2011

Vamos pa' el Norte de Tailandia!




Rumbo a Ayyuthaya
Domingo 2 de Noviembre

6:00 a.m.
Me levanto y recuerdo que por culpa del cansancio y la cerveza no pude hacer maletas la noche anterior así que como pude metí todo en la maleta en menos de nada ya que tenia cita en la terminal del sur de Bangkok a las 7:30 con Sai Putrakool.
Quien es Sai Putrakool? : Días anteriores por medio de contactos conocí de manera virtual a esta niña Tailandesa y se animo a viajar conmigo por el Norte de Tailandia sin ni siquiera tener real conocimiento de quien soy yo, para mi ya es normal viajar con extraños asi que no vi ningún problema.
Mientras me despedía de mi agradable Host Jane Suphasuta, uno de los Alemanes con quien compartía habitación decidió ir también conmigo pero el iría solo hasta Ayyuthaya y luego regresaría a Bangkok nuevamente.
La despedida con Jane y Mai fue más triste de lo que pensaba, es difícil creer que en tan solo 3 días puedes crear sentimientos de amistad tan fuertes, ella, por su parte me hizo prometer que volvería a Bangkok y me quedaría en su apto. ( Miss u Jane & Mai)
7:00 a.m


Sali junto con el Alemán a tomar el Subway que nos llevaría hasta la ultima parada y desde allí tomaríamos un taxi por 20 minutos mas hasta la terminal. Ya en el taxi tratabamos de interactuar con el poco ingles del conductor y de un momento a otro este empezó a tocarme la cara a lo que me corrí sorprendido y le dije que no hiciera eso, mientras el Aleman moría de la risa; El conductor trataba de decirme que era muy simpático (handsome) por mi barba que los Tailandeses no tienen barba, sin embargo no permití que siquiera intentara tocarme la cara de nuevo.
Llegamos a la estación de bus y teníamos que encontrarnos con alguien que NO conocíamos y que NO teníamos ni la idea de quien fuera. En el recorrido del taxi tratábamos de adivinar con el Alemán como podria ser Sai Putrakool, blanca, alta, tímida, pelo largo, ojos marrones, dije yo, pero perdí. A la primer Tailandesa con mochila gigante en la espalda y desorientada que vimos en la terminal le preguntamos ‘’Are you Sai’’, ‘’Yes and are you Camilo?’’, si senores, fue mas facil de lo que pensabamos. Ella, una persona delgada, tierna, pelo corto y mochila de casi el tamano de ella nos sorprendia con un carisma e ingles bueno, pasado unos minutos ya nos encontrabamos subidos en el bus con rumbo a Ayyuthaya . Somos la mirada de los pasajeros (una vez mas) quienes prestan atención a nuestras charlas y decidimos que es momento de aprender algo de Thai; Durante 2 horas repetíamos palabras que nuestra simpática Sai nos ensenaba, creo que la pronunciación no era la correcta o nuestras voces les recordaba algo pero ellos (los pasajeros) simplemente reían, pero acaso repetir Khu pĕn xỳāngr b̂āng estan difícil?. Uds, si ud senor..ita lector (a) tómese 5 segundos y repita Khu pĕn xỳāngr b̂āng, Khu pĕn xỳāngr b̂āng, no esta difícil no?
Llegar a Ayyuthaya fue un aire de recuerdos, sus calles, su gente, la forma de su vestimenta, lo libres que se ven, el calor con su brisa fuerte mas el bloqueador Tanga que llevaba puesto, era en definitiva como llegar a la costa, por un momento cerré los ojos en busca de esas memorias y al abrirlos un hombre ojo rasgados me preguntaba ‘’marihuana, cocaine?’’ –No señor…Esta muy temprano ;)
El sol nos quemaba aun con la Tanga puesta y solo deseábamos dormir pero estábamos de paso, ni siquiera pasaríamos una noche en ese pueblo así que buscamos nuestras guías y lo recomendable como en todo el Sudeste Asiático es visitar las ruinas, los templos. 5 horas tirando pedal! Que cosa tan maluca, llegamos molidos!. Acerca de las ruinas, increíbles (pero después de Angkor Wat no hay comparación). Nos dimos cuenta que los turistas son muy pocos o lo era ese día, en su mayoría eran Thailandeses que vienen a pasear . Muy bonito todo pero era tiempo de despedirnos de Henry, nuestro amigo Alemán y yo seguiría rumbo al Norte junto con Sai.
Hora de tomar el tren:
Era un domingo caluroso y las 5 horas jugando a creerme el Lucho Herrera me dejo como chupo…Llegamos a la estación de tren y NADIE me había dicho que los domingos los Tailandeses viajan GRATIS, de lo contrario hubiera hecho cambio de planes pero ya estábamos ahí y que mas da, tan solo 4 horitas hasta Phitsanolouk (parado). Los vendedores de carne, chorizos, grillos y especies raras transitaban los pasillos del tren mientras yo respiraba profundo y contenía la respiración para no generar un malestar, solo imaginen esta escena: Un tren lleno de asiáticos, la mayoría trabajadores , un calor infernal, una venta exagerada de carnes e insectos que expulsaban un repugnante olor para un resultado de mareada segura.


Phitsanolouk:
Llegamos a Phitsanolouk cerca de las 10 pm, buscamos algo de comer y ya en la para de bus averiguamos los tiquetes para Sukhotai, ese era nuestro destino, -El único bus sale a la 1:30 am. Nos repitieron y solo habían 2 opciones, dormir en esa ciudad donde no había nada que hacer y madrugar a tomar el bus o esperar hasta la 1:30 a.m. y la decisión fue esperar, ya quería estar en Sukhotai.
3:30 a.m. Llegada a Sukhotai, Alguien sabe de algún hotel?
Llegamos y al bajarnos del bus nos dimos cuenta que encontrar un hotel no iba a ser fácil, no habían taxis esperando y empezamos a caminar por casi 20 minutos cuando un letrero dice HOTEL, nos acercamos y SI SENORES! De mala muerte pero era un ‘’hotel’’ o mas bien una casa vieja con habitaciones donde te cobran por dormir, al lado había una caseta de aluminio y me asome y podía ver a una senora durmiendo con su bebe al lado, -Esa tiene que ser la administradora- Pensé y con un suave ‘’hey hey hello’’ se despertó asustada y pensando que la íbamos a robar y para acabar de rematar el bebe empezó a llorar, mi amiga le explico en Thai que necesitábamos una habitación y solo tenían una libre, estoy seguro que Sai no se sentía comoda durmiendo con un total desconocido pero era eso o…eso.